Chicote y su Yakitoro

Os presentamos la taberna japo de Chicote a precios asequibles: Este es uno de los locales, a los que quieres ir sólo por criticar a Chicote: seguro que tardan en servir, la comida está mala, es caro,....pero llegas allí y te causa muy buena impresión y encima te gusta el local. 

Está situado en la calle Reina 41, justo al comienzo casi de la Gran Vía. Es un local con amplios ventanales y muy luminoso, aunque ohhhh!!!!, olvídate de la privacidad durante una hora porque las mesas están relativamente juntas, y es muy probable que escuches toda conversación ajena. Probablemente, pretendían con este tipo de mesas de madera y juntas, hacer un guiño a las mesas alargadas de los restaurantes japoneses, en las que estás casi pegado al resto de comensales.

Pero, a pesar de eso, lo mejor sin duda,  son sus mesas con cubículos de hielo para tomarte las cervezas bien fresquitas ¡oh yeah!, me encanta esta idea. Y además, las cervezas son de tamaño de 500ml en adelante y aunque el precio es algo más elevado, probablemente, con una, estas servido para toda la comida.

La carta está dividida en tres secciones: yakitoro (brochetas, normalmente entran dos) del agua, de la granja y de la finca, unos acompañamientos, ensaladas y yakibokatas (bocadillos hechos al vapor). Los precios están entre los 4-8 € cada plato. 

               

Nosotros pedimos: 

• Ensalada de espinacas, queso manchego y salsa cremosa de tofu y hierbabuena. Plato muy sencillo. 
• Yakibokata de papada ibérica y pepino David Chang. El sabor suave de la papada contrarrestaba con el crujiente del pepino. El mix era excelente y el pan muy blandito.
• Atún rojo y pack Choy lacado sobre pan y salmorejo. El mejor plato sin duda.... Eso si, el pan era complicado de cortar con el cuchillo, me da que era para comerlo con las manos.
• Pollo frito crujiente con salsa agridulce cañí. Venían dos brochetas y muy buenas de sabor.
• Arroz blanco aliñado con sabores de Oriente. Todavía estoy dandole la vueltas a los ingredientes, para poder probarlo con mis amigos. 
• De postre una crumble de manzana con helado de vainilla, con un café.

En general, no acabas con sensación llena ya que se trata de un nuevo concepto de taberna en la que se va principalmente a tapear y la cena puede salir por 50/70 euros/ dos personas.

Y si hay que darles la enhorabuena, es por el personal con el que cuentan... Jóvenes, super atentos y pendientes de ti 100%. 

Una recomendación es reservar con antelación, porque el local se llena y es posible que no tengas mesa o esperes una horita larga. Si que es cierto que en su página web indican que tienen unas mesas sin reservar para posibles reservas de última hora, lo que se agradece. 

Hay veces que sales de un local pensando que no repetirás, pero mi sensación fue totalmente la contraria. ¡A ver cuando podemos repetir para poder disfrutar de otros platos!. 

Se trata de una buena alternativa para no repetir con los típicos locales que están proliferando por Madrid de comida variada y mediterránea. Si queréis probar comida diferente y estáis por el centro, no dudéis en acercaros. 

Buen finde. Ya está cerca San Valentín

Dulce